“Claramente busca que la prensa se autocensure”: director de “El Marino” sobre querella del concejal Hugo Toro por supuestas injurias

El concejal Hugo Toro.
El concejal Hugo Toro.
El 3 de marzo pasado, el concejal de Pichilemu Hugo Toro Galaz (UDI) presentó una querella por “el delito de injurias graves emitidas por escrito y con publicidad a través de medios de comunicación social […] en contra de mi persona”, en contra del director del diario El Marino, Diego Grez Cañete, alegando que éste tiene “participación de autor en grado de consumado, causando graves perjuicios a la honra y dignidad de mi persona […]”.

Toro anunció la querella —que es resumida y adjuntada al final de este artículo— el 16 de febrero pasado, a través de la radio que dirige un exalcalde condenado por cohecho y presentación de testigos falsos. Hugo Toro condujo un programa el 14 de febrero pasado, en esa radio, en que se calificó a ciertos grupos de la sociedad de forma despectiva —ampliado en sección posterior—.

Al respecto, el director de El Marino, Diego Grez, junto con señalar que le es “algo incómodo” referirse públicamente a este tipo de materias, manifestó sentirse “poco sorprendido” por la reacción del concejal Hugo Toro ante la publicación de las noticias sobre el controversial programa y reacciones. “Claramente ese señor, por medio de esta querella, busca que nosotros como medio y la prensa en general nos autocensuremos, que no hablemos de él, manteniendo así a la gente en un estado de desinformación”, señaló Grez.

El director de "El Marino" Diego Grez Cañete.
El director de “El Marino” Diego Grez Cañete.
“En Pichilemu podemos evidenciar dos problemas graves. Primero, que hay gente dispuesta a pagar sumas ridículas de dinero para tener programas radiales con el fin de desprestigiar a otros, y segundo, la polarización que está latente gracias a personajes que ya están haciendo campaña para llegar a la alcaldía. Sin duda que ninguna de estas situaciones beneficia a la comuna; esto debe cambiar, debe haber un cambio en la política a nivel local, hay que jubilar para siempre a los que no cumplen”, agregó el director de El Marino.

Respecto a las imputaciones que le realiza Toro —detalladas más abajo—, Grez indicó estar “tranquilo”, por cuanto “está claro que el programa ése es una verdadera apología a la discriminación. Desde los locutores hasta quienes llaman y salen al aire”. “Ese programa, del 14 de febrero, fue una verdadera burla para toda la comunidad. Llama gente que se refieren a otras personas como “la carita de enferma”. Incluso a mí se refieren como “el gordito de las grasas saturadas”. Y no es la primera vez en que escuchamos esta clase de dichos por estos personajes, que después incluso, los recalcan. Yo no voy a caer en el juego de estos señores, de descalificar a todo el mundo. Eso sí, no entiendo la desfachatez que tienen de querellarse en contra de quienes tienen la labor de informar a la comunidad, incluso lo que ellos hacen”, añadió.

“El rol de un medio de comunicación, le guste o no al señor Toro, es informar, educar y entretener. Nosotros tenemos el deber de informar, de manera objetiva e independiente, los hechos que suceden en nuestra provincia; además tenemos el deber de fiscalizar a quienes dicen ser funcionarios públicos, y si a él le incomoda eso, qué mal”, siguió.

“Además, si el señor Toro consideró que la información publicada era errónea, la Ley de Prensa lo faculta a pedir la publicación de una aclaración, a lo que nosotros estamos obligados como medio a hacer”, señaló Grez, concluyendo que “es curioso que Toro omita otros artículos que publicamos sobre él, en los que él se defiende y niega decir ciertas cosas, las refuerza, etc. En fin, él nunca se ha acercado ni a mí ni al subdirector del diario. Ojalá que el concejal se retracte de este triste espectáculo, y pida disculpas de una vez por todas a la comunidad que ofendió junto a Jaramillo, con los dichos que realizó en ese programa y en el siguiente”.

El trasfondo

El 14 de febrero del presente año, se emitió “Enlace comunal”, conducido por Hugo Toro Galaz, en el que su acompañante Francisco Jaramillo Arriagada se refirió en términos despectivos hacia ciertos grupos de la sociedad. Textualmente, al comienzo del programa, Jaramillo señala: “El amor natural es el amor normal, el amor que siempre debiera haber sido uno solo, entre un hombre y una mujer, pero han aparecido una serie de amores, amor entre lesbianas, amor entre gays […]”. Posteriormente, Jaramillo se refiere despectivamente al director de este medio, tras la publicación de las declaraciones de intereses y patrimonio del edil Toro: “Te tengo una novedad Hugo, parece que llegó Sherlock Holmes, parece que en el caso del gordito este, producto de las grasas saturadas, te quieren ir al empate […]”. De igual forma, se refiere al concejal Mario Morales como “gato de campo”, al hijo de la Presidenta Bachelet, Sebastián Dávalos, como “el gordo lleno de grasas saturadas”, y al alcalde como “el ratón”, arguyendo que en el municipio “están dedicados a hacer puras barbaridades y puras pelotudeces”.

Luego, Jaramillo insiste en dichos discriminatorios hacia ciertos grupos: “además de todos los pungas, los flaites, los lanzas, los delincuentes, los maracos, está lleno de maracos hueón, tenemos circo en que creen que es un arte, son travestis hueón, y se pasean ante todos los niños en pleno centro de Pichilemu, es un escándalo, una cosa inmoral”. Toro, quien no se opuso a los comentarios discriminatorios previos, señaló no estar de acuerdo con éste último porque “todos tienen derecho” a hacer lo que les venga en gana.

Jaramillo, luego, sobre la Semana Pichilemina, señaló que “lo único [que resta] es congraciarse y entregar esta semana a los turistas, y la gente honesta y la gente honrada. Pero esto va a servir nada más que a los pungas y a los patos malos, porque eso va a ser lo que va a pasar. […] [Deberían] haber traído por último algunos artistas que estén presos, para ser congéneres con el público que va a ver, porque el público que va a ver, porque van a estar todos los pungas, todos los lanzas”.

Toro, en conversaciones posteriores al mismo medio que emite su programa, señaló que “yo creo que todos cometemos errores […] porque aquí cuando la gente dice la verdad se le ataca, pero no me gustó la segunda verdad que dijo Francisco Jaramillo, mi amigo, que se refirió a las personas que son diferentes y que toman opciones diferentes, se le refirió que eran como maracos, a mí me dolió bastante”. “Yo ya no puedo aguantar ya las personas que me injurian […] ese señor me ha atacado bastante, y yo ya me aburrí de esa persona, y lo voy a demandar […] yo no tengo por qué permitírselo, por qué aguantarle, porque me está achacando cosas que yo no dije, y yo lo voy a demandar”, señaló en relación al director de este medio.

Lejos de disculparse por los dichos discriminatorios, Hugo Toro insistió en la edición del 21 de febrero del programa “Enlace comunal” en que se refirió a ciertas personas como “pungas” porque “no ha habido control policial” y que “la gente se está choreando de los pungas”, apoyado por Jaramillo. Justificó el llamar “pungas” a ciertos individuos porque “la gente me llama y me dice que tengo que decirlo”.

La querella

El documento en que Hugo Toro interpone la acción legal en contra de Diego Grez tiene una extensión de seis páginas, ocupando una gran extensión del mismo citas de los artículos publicados por “El Marino” en relación a los dichos discriminatorios emitidos en el programa “Enlace comunal”.

Toro comienza planteando que “en el minuto 29 y 40 segundos del programa” Francisco Jaramillo realiza los dichos que son cuestión de los artículos publicados en “El Marino”, a lo que él después expresa —según el documento, no así la grabación— “Bueno yo e [sic] en esa parte no estoy bien de acuerdo contigo cierto, yo creo que todos tienen derecho”. “Del tenor literal de lo expuesto, se desprende claramente que fue don Francisco Jaramillo Arriaga [sic], quien se refirió a las condiciones sexuales y otros temas que dicen relación a las preferencias sexuales”, señala el texto, presumiblemente redactado por su abogado.

Luego, acusa que en el artículo “Masivo rechazo a comentarios clasistas y xenófobos emitidos por concejal UDI Hugo Toro Galaz en programa radial”, “publicación ‘propia’ del señor Grez, demuestra y acredita los perjuicios ocasionados a mi persona pública [subrayado], por las injurias que éste ha proferido en mi contra al tratarme de homofóbico y xenófobo”. Continúa que, “a raíz del comentario injurioso [sic] del Director del Diario el Marino se suscito [sic] una serie de comentarios anexos. Todos los comentarios y opiniones que se vertieron partieron de la base de que fui yo quien los realizó, así las cosas, el mismo día 14 de febrero del año en curso también publica en su diario y con el siguiente titular: ‘Presidente del MOVILH sobre comentarios homofóbicos del concejal Hugo Toro [subrayado]: ‘De algunos fascistas de la UDI nada me sorprende'”.

Posteriormente dice que “el señor Grez, con fecha 26 de febrero del año 2015, insiste en denostar mi imagen y señala como titular ‘Concejal Hugo Toro en 2012: ‘Hay gente que habla con tanta maldad y con tanto odio por la radio hacia los demás”“, citando parte del mencionado artículo, agregando que “como vera [sic] SS., el señor Grez es reiterativo en señalar que fui yo quien profirió los comentarios esgrimidos y objeto de la presente querella, demostrando su animus injuriandi al hacer de mutuo propio un símil con una entrevista del año 2012″. Sigue: “Efectivamente SS., luego de la narración de los hechos anteriormente señalados, podemos advertir que es el señor Grez quien comienza, insiste y reitera que fui yo quien profirió los dichos. En su actuar se desprende su clara intención ‘positiva’ de menoscabar mi imagen a través de un medio de comunicación al señalar en reiteradas oportunidades que soy una persona clasista, homo fóbica [sic] y xenófoba”.

“En mi calidad de autoridad y personaje público de la comuna de Pichilemu, he recibido una gran cantidad de críticas de parte de la ciudadanía. Todas criticas [sic] que atentan directamente mi imagen. El acto ejecutado por el Querellado, al carecer de fundamente [sic] ha sido ejecutado con la clara y única intención de deshonrar y en descrédito de mi persona”, arguye.

Por lo señalado, solicita al Juez “condenar al querellado a sufrir las penas de reclusión menor en sus grados mínimo a medio y multa de once a veinte unidades tributarias mensuales”, “por el delito de injurias graves cometidas por escrito y con publicidad […] en su calidad de autor en grado de consumado”. De igual forma pide se oficie al diario El Marino “que remita todas las publicaciones referente al objeto de la presente querella, y en particular las publicaciones de fecha 14 y 26 de febrero del presente año”, y se oficie a la radio donde es emitido el programa que remita copia del audio del programa. Participará como testigo Francisco Jaramillo Arriaga [sic], y se presentará una “declaración voluntaria de don Hugo Arnaldo Toro Galaz”.

La audiencia quedó agendada para el martes 30 de abril a las 15:25 horas, en el Juzgado de Letras, Garantía y Familia de Pichilemu.

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