Algo me decía que estaba cerca el aniversario de la primera rubia que conocí en mi vida. Sin embargo, tuve que meterme al “google” para salir de duda. Y ¡claro!, efectivamente hoy -5 de Agosto- se cumplen 45 años de la muerte de la Bomba rubia norteamericana que un día como hoy decidió (o decidieron) que debía abandonar este mundo, pese a que era más atractivo con ella, viéndola en pantalla o fuera de ella.
Fue, precisamente en la pantalla del ya mítico Cine “Royal” de Pichilemu -acaso el único en el mundo, en que el público entra a la sala por debajo de la “pantalla”- en donde vimos por primera vez a la exuberante Marilyn Monroe (sin silicona de por medio) en la película “La Jungla de Cemento”.
Aunque no vimos completa la película, ya que había que esperar un buen rato de iniciada la función para que -ante las caras ansiosas de niño y sin ningún peso en los bolsillos- la Señora que cortaba los boletos diera la venia para poder entrar a la sala e irnos a la galería o “chantarnos” en una butaca vacía a ver parte de la película que se estaba exhibiendo.
Del argumento nada que recordar. Sin embargo, aquella rubia hasta hoy se nos quedó -como pocas- en la cabeza. Nos convertimos en embelesados fans a través del tiempo. Y aunque no hemos visto todas sus películas, sí coleccionamos -ahora en imágenes digitales- fotografías de escenas de algunas de sus películas, como del making off, o de otras que la eternizaron en la memoria de millones que siguen, de una u otra forma, recordándola.
MUERTE
Su muerte temprana, a los 36 años de edad, cuando estaba en lo mejor y flor de su vida, no así en su azarosa vida que la llevó a casarse en cinco ocasiones, todas las cuales concluyeron en divorcio. Su vida sentimental no era feliz.
Sus deseos de ser madre eran vanos y, aparte de sus crisis de inseguridad, producto de los traumas formados durante su niñez -época en la que su madre tuvo que ser internada en un hospital psiquiátrico, porque padecía esquizofrenia- fueron agudizando paralelamente sus problemas con las compañías cinematográficas y carrera.
A todo ello se agregaba el constante asedio de los fotógrafos y periodistas. Pero no solo eso, sino al “asedio” de los poderosos políticos que gobernaban su país: John Kennedy como Presidente de Estados Unidos, y su hermano Robert Kennedy con un importante cargo gubernamental, donde se la disputaban, pese a que ambos estaban casados con atractivas mujeres.
Pero vamos por parte. En 1946 se divorció del irlandés James E. Dougherty, con quien se había casado a los 16 años. Enseguida contrae matrimonio con el fotógrafo André de Dienes, quien muy luego se separó de ella al enterarse de que salía con otros hombres.
Su inestable vida sentimental la llevó a relacionarse con el director Elia Kazan. Sin embargo, poco después contrajo nuevas nupcias con el escritor Robert Slatzer, unión que duró unos días a causa de su dependencia de los barbitúricos.
El año1954, Marilyn se casó con el famoso jugador de béisbol, Joe Di Maggio, un hombre celoso y dominante, no entendió las crisis por las que atravesaba la diva y nueve meses después acuerdan su divorcio.
El año 1960, la sensual actriz vuelve a reincidir en el matrimonio, casándose con el dramaturgo Arthur Miller, quien le escribió el guión de la película The misftis; sin embargo, como todas sus uniones, el matrimonio se disolvió en 1961.
FILMOGRAFÍA
Marily Monroe nació el 1º de Junio de 1926 en Los Angeles, California. Su verdadero nombre fue Norma Jean Baker. Su madre, Gladys Monroe Baker, la bautizó así en honor a la artista de cine mudo Norma Talmadge.
A los 19 años -ya con matrimonios y divorcios a cuesta- inició su carrera de modelo, posando para revistas. El año 1945 apareció en más de 30 portadas. En julio de ese año Ben Lyon, jefe de reparto de la 20th Century Fox, la entrevistó y quedó fascinado con su presencia, contratándola más tarde con el atractivo sueldo de 125 dólares semanales. Paralelamente, le cambió el nombre por el de Marilyn -de Marilyn Miller, la actriz de éxito del momento- y agregándole el apellido de su madre.
Poco tiempo después rodó su primera escena en una película, sin embargo fue eliminada del montaje final. No obstante, en la segunda película -Ladies of the chorus- obtiene el papel protagónico.
La chica del calendario (conocida y consagrada por fotos donde apareció completamente desnuda, el año 1947), alcanzó a filmar varias películas, pero la gran mayoría pasó sin pena ni gloria.
El año 1953 apareció en la portada del primer número de Playboy con la famosa fotografía “Sueños dorados”.
En su filmografía destacan las películas Vidas rebeldes, El multimillonario, Con faldas y a lo loco, El príncipe y la corista y Río sin retorno, entre otras.
Otros títulos, son: Una Eva y dos Adanes (con Tony Curtis y Jack Lemmon), The Asphalt Jungle (primera película en que le conocimos).
Monroe fue reconocida con el Globo de Oro como la Mejor Actriz de Comedia en 1960. Un año después inició el rodaje de su último largometraje, Something’s got to give, coprotagonizada por Dean Martin y dirigida por George Cukor.
Han transcurrido nada menos que cuarenta y cinco años y aún se sigue escribiendo sobre ella, especialmente lo que dice relación con su muerte y otras “confesiones”, como las que se señalan en los dos últimos libros sobre ella, donde siguen aumentando el mito de quien fuera la adorable y apetecible “bomba rubia”.
La subyugación por su encanto, belleza y sensualidad ha alcanzado a todo el planeta. Incluso a nuestro país, donde el propio columnista dominical del diario El Mercurio, Enrique Lafourcade le tributó el libro “Marilyn que estás en los cielos”, donde le pone textos a decenas de fotografías -todas en blanco y negro- pero no pocas, verdaderamente sublimes. Libro que encontramos en aquellas “Librerías de viejo”, en las primeras cuadras de San Diego.
Y cómo no acordarse, de la canción donde hasta Los Prisioneros cantan “Marilyn, Marilyn” …. Lo mismo ha hecho el Beto Cuevas y otros cantantes.
