En prisión preventiva, por los 150 días de plazo que dio el Tribunal, quedaron los cinco extranjeros imputados por el delito de tráfico de estupefacientes, toda vez que fueron sorprendidos transportando más de 59 kilogramos de clorhidrato de cocaína que tenía como destino el balneario de Pichilemu.
La audiencia de formalización se realizó en el Tribunal de Garantía de Pichilemu, ante gran expectación periodística. En ella el fiscal Rodrigo Troncoso leyó las pruebas que tienen contra los cuatro imputados de nacionalidad peruana, y el ciudadano colombiano. Tras la lectura de los hechos, el persecutor le solicitó al juez Rodolfo Moreno la medida cautelar de prisión preventiva para todos los implicados, alegando el peligro para la sociedad que representan.
La defensa de los cuatro imputados -que presentaron un abogado defensor penal público por cada uno, menos el padre e hija que compartieron legista privado- se basó en declarar ilegal la detención, aludiendo que habían pasado los seis días legales para ampliar la detención y que entre ellos no se conocían por lo que no se podría tratar de una organización criminal como señaló el fiscal, por lo mismo solicitaron una cautelar menos agravante, como es el arresto domiciliario. Finalmente el magistrado aceptó la solicitud del Ministerio Público y decretó la prisión para los cinco imputados.
La investigación
La investigación comenzó el pasado mes de marzo, cuando la Fiscalía Local de Pichilemu comenzó a trabajar en una información que decía sobre unos microtraficantes de cocaína. Con estos antecedentes se solicitó la investigación a los peritos de la Brigada de Antinarcóticos de la PDI Rancagua, los que tras varios meses de diligencias lograron detener al microtraficantes y posteriormente establecer gracias a escuchas telefónicas que la organización criminal realizaría un traslado desde el norte de Chile.
Según la información entregada durante la audiencia de formalización, durante la madrugada del sábado llegó a Santiago un bus proveniente del norte del país. Al llegar, su chofer, E.L.C.A. (55) y el auxiliar P.C.S.J. (47), se reunieron con los también peruanos J.A.V.M. (63) y su hija A.K.V.T. (30), para entregar los 59 paquetes del clorhidrato de cocaína que traían desde el país incaico. El destinatario era el colombiano G.O.R. (63), el encargado de distribuir la droga en Pichilemu y otras zonas de la Región de O’Higgins. Cabe destacar que la incautación es una de las más grandes que se han realizado en la región; la cocaína incautada llegó en los peritajes hasta los 98% de pureza, por lo que las 1 mil 200 dosis y los 2 mil 200 millones de pesos pudo haberse doblado o triplicado.
Banda organizada
“Cada uno de los imputados tenían participaciones específicas, dos de ellos debían realizar la internación, transporte y entrega de la droga, los otros tres tenían la función de la recepción, dosificación y venta. El tribunal determinó que los antecedentes que son preliminares fueron suficientes para declarar la prisión preventiva y 150 días de investigación. En marzo se inició la investigación con respecto a otras personas y en agosto-septiembre ya teníamos antecedentes de una banda de extranjeros que se dedicaba a la internación de droga y que se vinculaban a personas que posteriormente se vendía en Pichilemu, así fue como llegamos a la cúspide de la banda, a lo más alto de la organización”, indicó el fiscal Troncoso.
Continuó. “No podemos descartar que existan más formalizados en este proceso de investigación. La pena a la que se exponen es de los 5 años y un día, hasta 20 años, pero lo que nosotros propusimos es un grado más que parte en 10 años y hasta presidio perpetuo. El hallazgo fue importante, sabíamos del cargamento de droga pero no de la cantidad, pues siempre se refirieron a paquetes o pasajeros, el pesaje era totalmente desconocido por lo que fue una sorpresa la gran cantidad de droga incautada, por lo que se ha vuelto tan importante esta causa, ya que la expansión de la droga a nivel de dosis podía aumentarse en manos de terceros que la dosificaran”, agregó el fiscal de la causa.
(El Rancagüino/O. Rojas Connell)
