Escuela de gimnasia donde nació Tomás González está cerrada hace cuatro años
Fuente: El Mercurio online
La rama de Gimnasia de la Universidad Católica debió congelar el desarrollo de la actividad debido a la falta de espacios y a que no les resultaba rentable por la escasez de gimnastas.
SANTIAGO.- Tomás González está en su mejor momento. Luego de las dos medallas de oro obtenidas este domingo en la Copa del Mundo de Francia, el gimnasta nacional se encumbra como uno de los mejores de la especialidad en el planeta.
Lo de González no es común en Chile, es más, es un caso aislado dentro del espectro deportivo que se vive en el país. Un claro ejemplo de esto, es que la escuela donde se formó el gimnasta, la rama de Gimnasia de la Universidad Católica, está cerrada hace cuatro años.
Los motivos son variados, y como en gran parte de la actividad deportiva del país, una de las razones de peso es la falta de apoyo económico.
“Habían 10 o 12 gimnastas, estábamos entrenando en el CAR y entre las malas condiciones que nos daban allá y los pocos gimnastas, era una rama que no generaba ingresos e iba cada vez más para abajo”, justifica Rodrigo García, jefe de deportes del club cruzado.
Pero aún hay más, ya que “en el CAR no lo pasamos nada de bien, incluso se llevaron todos los implementos porque tenían muchas deudas y estar ahí era un costo demasiado alto”, explica el encargado.
García continúa argumentando que “el esfuerzo que se hace día a día no se ve compensado, se invierte pero sin grandes resultados, con lugares no adecuados, entonces así es imposible poder conseguir algo”.
El caso de Tomás González es único dentro de su especialidad, ya que con sólo 6 años, fue reclutado por Eugenio Belov, destacado entrenador ruso y quien fue un visionario al declarar, en ese entonces, que el chileno sería un medallista olímpico y que llegaría a la cúspide de su disciplina.
El jefe de deportes de la Católica manifiesta que los logros de González motivan a los más chicos, “pero hay que ver cómo lograr que el esfuerzo se pueda aprovechar. Hoy Tomás lo está haciendo porque lo apoya la empresa privada, pero no está el apoyo del Estado. Con él lograremos oro en Londres pero gracias a todo lo que él mismo ha conseguido. Tuvo la suerte de que Farkas le regalara un gimnasio, cosa que no pasa con nadie más”.
Es más, el personero cruzado es claro en declarar que “Tomás es un caso único. Pueden haber más destacados pero será una búsqueda enorme, por algo lo tomaron los rusos tan chico. No es fácil poder encontrar talentos así”.
Pese a todos estos inconvenientes que ha tenido la rama de Gimnasia, García señala que González ha ofrecido su ayuda para poder reflotar la actividad, en una manera de “devolver la mano” a la institución que lo vio nacer.
Sin embargo, “todo esto se verá después de lo que suceda en Londres 2012. Por ahora está enfocado en su carrera así que luego de las Olimpiadas, veremos en que puede ayudarnos”, finaliza Rodrigo.
