Recién el viernes 27 de Julio recién pasado, tras una controvertida elección, resultó electo como alcalde, quien era concejal DC, Víctor Rojas González, en cierta forma “por la estrategia” del concejal PPD, Hernán Garrido Salas (ex DC).
Hoy, cuando han pasado solo 15 días, ambos están enfrentados a una acusación ante el Fiscal Regional, por un presunto delito de Cohecho; donde no se descarta que estén involucrados una ex autoridad y un actual funcionario municipal.
La información que conocíamos desde hace algunos días -con una autoimpuesta restricción- quedó liberada para informar. Y ya se conocen más detalles de la investigación que se está realizando.
Aunque -según la percepción de parte de la comunidad- se estaban solucionando problemas concretos -que el anterior alcalde Vargas, estaba “chuteando”- como la apertura de Bienes Nacionales de Uso Público por más de seis años cerrados por un particular (calle Vecinal, en el sector Infiernillo Oriente), mejoramiento de calles de tierra, con un verdadero “festival de hoyos”, entre otras acciones; aparte de las buenas intenciones manifestadas por la actual autoridad comunal. Muchos se atreven a vaticinar un abrupto final para el flamante alcalde Rojas, el concejal Garrido, arrastrando a otros personajes.
Lo anterior, según se ha podido averiguar, es el anunciado coletazo de la Concesión de Parquímetros de la última temporada de verano.
Según las informaciones ya difundidas en diversos programas radiales, habrían ocurrido -conversaciones de ambas autoridades con el que resultó ser el representante del Concesionario (a), y se habría incurrido en un delito- cuyos exactos alcances deberá despejar y precisar la investigación. Todo ello -según se ha anunciado desde hace tiempo- está grabado en una cinta magnetofónica, ya en poder del Fiscal Regional.
Todo parece indicar, entonces, que Pichilemu estaría “ad portas” de un nuevo escándalo -como ya lo habíamos dejado entrever en días pasados- que pondrá a Pichilemu en la órbita noticiosa. Una ocasión lamentable para Pichilemu, su nueva autoridad comunal, y que reafirmaría el “pésimo ojo” de los intrusos que operan en la política y que meten su cola donde no les corresponde.
A todos ellos y a sus acólitos que les siguen hay que hacerles la tremenda tapa o cruz cuando corresponda.
Nuestra comuna no resiste tanta impudicia. Cada día lo hunden más los políticos car e palo que mueven a las personas como títeres, en pro del poder sin importarles el destino de una comuna que se merece un destino mejor y no peor como el que amenaza este nuevo escándalo que se está conociendo.
El Expreso de la Costa
El periódico local, que anuncia su aparición mensual para este viernes 17, trae -según anuncian sus titulares- importantes detalles de esta bomba de racimo, y cuyos efectos aún no son previsibles.
A estar atentos ….
