“LAS LEÑAS” PUEDE SER UNA REALIDAD Y DEJAR DE SER UN SUEÑO

El Corredor Bioceánico “Las Leñas” se pone nuevamente en el tapete tras el estudio –encargado por CORFO VI Región- dado a conocer ayer en el salón Prat de la Intendencia Regional por la empresa consultora que lo elaboró, Arcadis Geotécnica. Estudio que indica que es más barato de lo que originalmente se aseguró que costaba durante la gestión de los ministros de OO.PP. Tohá, Cruz, Etcheberry (entre 1.500 y 2.000 millones de dólares).
Y la verdad que el estudio de Arcadis Geotécnica señala que las cifras que demandaría su construcción no van más allá de los 667.3 millones de dólares, bastante menor que los millones de dólares que “manejaban” los ex ministros. Lo que claramente “aterriza ese proyecto a cifras reales y, por tanto, lo hacen viable” en beneficio a un paso alternativo al Paso “Los Libertadores”, el que cada año –con su cierre obligado por las condiciones climáticas debe permanecer cerrado- provoca la pérdida de millones de dólares.
A través del sistema de Concesiones del MOP es perfectamente factible incluir este proyecto que –por razones mezquinas, estúpidas- había quedado olvidado en la discusión regional. Y que ahora ha “revivido” gracias a la visión de CORFO regional; hecho que nos alegra y nos motiva a felicitar a su director regional, arquitecto Carlos Muñoz Parra.
Tanto el corredor bioceánico por “Las Leñas”, en la provincia de Cachapoal, como el paso por “las Damas”, en la provincia de Colchagua, son claramente dos alternativas que ASEGURAN que el tránsito por esas vías no sufrirán cierres, ello porque se construirían a más baja altura que el Paso “Los Libertadores”.
Es de esperar que las autoridades regionales –aparte de la buena acogida que este estudio ha encontrado en el Intendente Carlos Bravo, según se dio a conocer- apoyen este proyecto, por cuanto es factible su construcción y sobretodo conveniente PARA EL PAÍS. Y particularmente de un beneficio mayúsculo para nuestra región, por el flujo y tráfico que se generará de carga más directa a los actuales puertos de Valparaíso y San Antonio, en una primera instancia, y en un futuro cercano –Dios mediante- al Puerto que debiera construirse en nuestra región.
No está demás señalar que nuestra región, como la VII, requieren un puerto alternativo a los anteriores, para poder embarcar Cobre, Acido Sulfúrico, las exportaciones de frutas, vinos y madera, entre otros productos. Y si agregamos productos de Argentina, demás que se justifica volver a pensar en un Puerto para la Región del Libertador O’Higgins.
Un puerto en la costa de la Provincia de Cardenal Caro, a unos 10 kilómetros al norte de Pichilemu, permitiría ahorrarse al menos 50 kilómetros hacia el Puerto de San Antonio.
Estos 50 kilómetros menos significa –entre otros aspectos- ahorrarse riesgos, accidentes, costos. Y, al contrario, generaría miles de empleos que nuestra región no tiene para sus habitantes.
Sería conveniente que la materia gris de nuestros brillantes parlamentarios, de todos los sectores, le dedicarán un tiempito a estos temas realmente importantes para el futuro de nuestra región y que los pongan en la agenda del Bicentenario.

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