“Somos capital prvincial y la gobernación cumple funciones decorativas, la Sra. Gobernadora no es de Cardenal Caro, y al parecer sufre de autismo. Para colmo de males su equipo (si se puede hablar de equipo) cero aporte, ni siquiera escuchan a los que pedimos el voto e hicimos campaña por la Pdta. Bachelet”, aseveró Garrido, a lo que agregó, “realmente da vergüenza ser testigo de tanta incapacidad, ojalá los Sres. parlamentarios que apitutaron a estos ineptos hagan algo para remediar sus metidas de patas”.
Continuó: “Para colmo de males, el Concejo Municipal tiene dos permanentes opositores y cuatro “oficialistas” que cumplen cabalmente su rol de arroz graneado, perfectamente podrían formar comisiones de trabajo (la ley los faculta) y hacer propuestas con la debida antelación y no esperar que esté la escoba para sacar la voz con frases populistas”.
También se refirió a las “organizaciones vinculadas al turismo”, quienes en su opinión “en general critican y no aportan nada, nos encanta recibir el dinero fresco de los veraneantes, pero, sin sufrir incomodidades”.
“Para colmo de males”, insiste, “todos ponen en evidencia las falencias ¿y las soluciones? Roberto Córdova puede mostrar cifras impresionantes, en términos de conseguir recursos en proyectos y programas ejecutados y por ejecutar, le está cambiando la cara al pueblo, pero una excelente gestión se ve empañada por detalles perfectamente corregibles, sólo debe darse un tiempo para escuchar a los que lo apoyamos y también a los otros…”.
Concluye: “La política es y será un juego colectivo, los que lo olvidan suelen tener caídas estrepitosas. Por último propongo convocar a la comunidad organizada, a los muchos jóvenes profesionales pichileminos, estudiantes, etc., etc., para en conjunto diseñar un proyecto de desarrollo comunal, para el corto, mediano y largo plazo. Pichilemu del futuro no puede ser fruto de la eterna improvisación”.
