La nueva línea está enfocada en mejorar la productividad de los cultivos y transferir conocimientos a pequeños y medianos agricultores.
El Centro de Estudios Avanzados en Fruticultura (CEAF) ha consolidado su Línea de Investigación Hortícola, marcando un nuevo hito en el desarrollo agrícola regional. Esta iniciativa surge del trabajo de un equipo multidisciplinario de investigadores e investigadoras, quienes han orientado sus esfuerzos a la mejora de cultivos hortícolas con un enfoque inclusivo y territorial.
Uno de los principales desafíos de esta línea es abordar la diversidad de cultivos hortícolas en la región, considerando su relevancia productiva y social. La investigación comenzó con las cucurbitáceas, en particular la sandía, debido a su importancia productiva en la región de O´Higgins. CEAF está desarrollando un programa de mejoramiento genético de portainjertos para sandía, adaptado a las condiciones locales, para favorecer una producción más eficiente y con menor consumo de agua, lo que resulta crucial en un escenario de creciente escasez hídrica.
El respaldo del Gobierno Regional y el Consejo Regional ha sido clave para fortalecer esta línea de investigación, permitiendo que la inversión en ciencia genere, además, un retorno social tangible. A través de diversas actividades de divulgación, CEAF ha transferido conocimientos a pequeños agricultores, potenciando su autonomía productiva y promoviendo prácticas más eficientes. Por lo que el centro de investigación se ha convertido en un aliado estratégico para los pequeños agricultores, brindándoles acceso a conocimientos especializados y herramientas innovadoras que les permiten fortalecer sus cultivos, mejorar su rendimiento y aumentar su productividad.
Para el Gobernador Regional y presidente del directorio de CEAF, Pablo Silva Amaya, “este trabajo de investigación es fundamental para aumentar la producción de los cultivos en nuestra región. Lo entendemos como una guía metodológica que mejorara los procesos productivos. Confiamos plenamente en nuestro equipo que podrá elaborar un contenido con sustento, el cual permitirá impulsar a nuestros agricultores en materia de productividad”, agregando que “nos interesa que el aprendizaje de estos estudios se traspase a nuestra comunidad, en específico al sector agrícola de nuestra región que es reconocido por la calidad de sus productos en Chile y en el extranjero”.
A su vez, el investigador líder de la Línea de Investigación Hortícola, Ariel Salvatierra sostuvo que, “es una responsabilidad muy grande trabajar con fondos públicos y que éstos lleguen a las personas que tienen más necesidades y el mundo hortícola las tiene. O sea, hay grandes productores de hortalizas, pero también hay medios, pequeños y de subsistencia. Entonces, poder mostrarles a los productores cómo generar sus propios plantines a partir de talleres de injertación de hortalizas es un aporte de conocimiento que impacta de manera real. A partir del mes de julio vamos a repetir estos talleres para llegar a más productores y ampliar la divulgación de conocimientos nuevos no solamente desde la teoría, sino que, en la práctica. Desde el CEAF empujamos el compartir conocimientos para hacer de nuestra agricultura regional una que sea más eficiente y, por, sobre todo, sensible a su entorno”.
Agregó, “una de las cosas muy destacables de este centro es que hay un grupo de profesionales multidisciplinarios y los problemas que existen o que puede haber en el territorio los podemos enfrentar desde CEAF desde una mirada integradora de muchas visiones. Entonces, cuando surge un problema en un cultivo y nos llega esa necesidad, podemos, trabajar una estrategia en conjunto para encontrar soluciones”.
Es importante destacar que la región de O’Higgins ocupa el segundo lugar en la producción de hortalizas a nivel nacional, destacándose especialmente en el cultivo de sandía, melón y zapallo de guarda, siendo casi el 40 % de la superficie dedicada a las hortalizas en la zona.
Con esta nueva línea de investigación, CEAF reafirma su compromiso con la innovación hortícola y la seguridad alimentaria, respondiendo a los desafíos productivos y sociales de la región.
