En el contexto de una visita oficial a la subsede del surf de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos, las máximas autoridades de deporte y el director ejecutivo de Santiago 2023 tomaron clases de la escuela municipal de esta especialidad deportiva, en la playa grande.
Son las 10:30 en Pichilemu y hay un movimiento atípico para un miércoles cualquiera. Hay autoridades, niñas y niños, un corpóreo, arena, tablas de surf y olas, muchas olas.
En la playa grande están el ministro del Deporte, Jaime Pizarro, la subsecretaria de la cartera, Antonia Illanes; la subsecretaria de Turismo, Verónica Pardo; el alcalde de Pichilemu, Cristián Pozo, y el director ejecutivo de Santiago 2023, Harold Mayne-Nicholls. A ellos se suman el popular Fiu y unos pequeños surfistas, todas y todos listos para ingresar al agua. Unas instrucciones y está todo preparado para la acción.
“Esta es una experiencia nueva para mí. Soy muy deportista, pero no me había aventurado en el surf y parece fácil de manejar, pero la verdad es que es complejo y requiere mucha concentración y conocimientos”, reconoce el ministro Jaime Pizarro.
“Cuando me plantearon este desafío pensé que no me la podría, pero aquí estoy. Esta es la oportunidad que tengo de probar, atreverme y entender de qué se trata este deporte que cautiva a miles en el mundo y que, además, ubica a Chile como una de las mejores costas para su práctica”, comentó por su parte Mayne-Nicholls.
La competencia panamericana del surf se realizará entre el 24 y 30 de octubre en Punta de Lobos, playa de Pichilemu, la que es Reserva Mundial del Surf y reconocida internacionalmente por sus condiciones extraordinarias para practicar esta disciplina deportiva.
Además, este deporte será uno de los de libre acceso con aforo limitado para que la comunidad pueda vivir la experiencia de ver a los mejores especialistas de América.
