
El querellante le imputa el delito de «fraude al fisco, previsto y sancionado por el artículo 239 del código penal», según reseña una radio local. «Los hechos indicarían que mientras el señor Morales participaba de las sesiones del concejo municipal, simultáneamente cobraba horas extras en el Hospital de Pichilemu», indicó el abogado querellante al mencionado medio.
Según aquella fuente, el concejal Morales «arriesga una pena de presidio menor en su grado medio a máximo e inhabilitación absoluta temporal para cargos o empleos públicos en sus grados medio a máximo», de comprobarse que cometió algun delito.
Jaramillo había anunciado acciones legales en contra de Mario Morales en semanas anteriores, a través del programa radial «Sin pelos en la lengua», del exregidor Mario Moraga Cáceres.