El Comité de Defensa de Punta de Lobos se pronunció, a través de un comunicado dirigido a los medios de prensa locales, sobre el reciente dictamen emitido por la Corte de Apelaciones de Rancagua, que declaró como ilegal el congelamiento inmobiliario en el sector de Punta de Lobos, medida impulsada por el municipio local.
Al respecto, señalan que “como corresponde, respetamos la decisión” de la corte; no obstante, solicitan al municipio “el agotamiento de las estrategias que su equipo jurídico estime conveniente”. Asimismo, detallan que “este Comité cuenta con una amplia base de representación ciudadana, y lo conforman pescadores y trabajadores de orilla, deportistas ligados al surf, entre otros Ramón Navarro, organizaciones sociales ligadas al desarrollo de las comunidades, los gremios, las Cámaras de Turismo y de Comercio, empresarios y dueños de terrenos ubicados en Punta de Lobos”, y destacan que el Comité es presidido por el alcalde Roberto Córdova, contando además con el “apoyo unánime del Honorable Concejo Municipal”.
El Comité de Punta de Lobos argumenta que el congelamiento de permisos de edificación en Punta de Lobos “responde a la necesidad de proteger el patrimonio natural, cultural y económico más importante de Pichilemu”. “Hoy no existe acceso público a olas y playas, y si los privados cierran sus terrenos para construir, se pierde la posibilidad de poder caminar por el acantilado y disfrutar del bello paisaje, los morros, las olas, y los pescadores artesanales verán amenazada su actividad de recolección. Además hoy no existen normativas y el equipamiento adecuado de protección. En un suelo no absorbente, la construcción indiscriminada seguramente desatará un desastre ecológico por aguas servidas”, señalan.
A esto, agregan que “el Comité ha trabajado todo este tiempo para lograr un gran objetivo que beneficiará a toda la comunidad, y es lograr la creación de una área protegida de acceso público por el borde costero de Punta de Lobos”, y que “sólo así resguardaremos este precioso y único lugar del mundo para todos los pichileminos de hoy y para las futuras generaciones”. “Para lograr esto se ha conversado y negociado con casi todos los propietarios de Punta de Lobos y tal ha sido el acogimiento de esta idea, que hay privados que están dispuestos a ceder parte de sus terrenos”, señalan, destacando que “el Comité no atenta contra los privados, al contrario, muchos se han sumado, entendiendo que se busca el bien común para nuestra comunidad. Buscamos un beneficio social permanente a partir de la protección del borde costero de Punta de Lobos, a diferencia de un número reducido de personas que sólo buscan un lucro de corto plazo a partir de proyectos inmobiliarios desmesurados”.
“Invitamos por tanto, a la comunidad, a formar parte de esta causa. Como Comité redoblaremos nuestros esfuerzos y estrategias para proteger nuestro paraíso, que durante años ha acogido a los Pichileminos, pescadores, turistas, deportistas, familias, extranjeros y a todo el que ha disfrutado alguna vez de este lugar y que sentimos, nos pertenece a todos y que debe seguir siendo patrimonio de las nuevas generaciones”, concluye el comunicado.
