Farías lamentó que “habiendo tantas otras cosas se llevaron una máquina overlock”, con la que “los niños hacen trabajos (en estas máquinas), manteles, los que pueden, otros sacan las hebritas, y ahí hacen los trabajos que después vendemos y eso mismo sirve para la mantención del colegio”.
Agregó que hizo la denuncia en Carabineros, la cual se derivaría al Juzgado local. “Decían los Carabineros que de todas formas había que hacerla, porque si se encuentra ahí una cosa y para poder la gente tomarla, agarrarla”, concluyó.