Cerca de las 17 horas del sábado pasado, un llamado a Carabineros de Rapel de Navidad alertó que un joven, tras tomar un baño en el río, no volvió a la superficie. Inmediatamente, la unidad policial inició un intenso operativo de búsqueda, que incluyó una entrevista con quien denunció el suceso, quien señaló que su amigo, Hernán Andrés Torres Ojeda (18), se “lanzó a las aguas y jamás retornó”.
El desaparecido joven salió en la tarde del viernes de su casa, en la población Mirador Baquedano I de la localidad de Llolleo, comuna de San Antonio, Región de Valparaíso, junto a su hermano de 15 años, luego de haber sido invitados por la polola de Hernán a pasar el fin de semana junto al río Rapel. Su madre Daniela Ojeda “les dio permiso para viajar, pero les pidió encarecidamente que se cuidaran; aunque ella sabía que Hernán haría cualquier cosa por proteger a su hermano”.
Pasadas las 19 horas del sábado, recibió un llamado que la ha mantenido intranquila desde entonces. “Me dijeron que Hernán se había metido al río, justo en el sector conocido como la Casa de Máquinas, se había ahogado y que su cuerpo no aparecía por ninguna parte”, contó a un medio de San Antonio. Acto seguido, se trasladó al lugar del lamentable suceso. “Me vine al tiro para acá, pero hasta ahora nadie sabe dónde está el cuerpo de mi hijo”, indicó, agregando que “me dijeron que se estaba bañando cuando de repente no lo vieron más, pero la verdad es que no sé por qué Hernán se metió al río si no sabía nadar”.
El personal policial de Rapel de Navidad dio aviso a la Gobernación Marítima de San Antonio sobre la desaparición del joven, mientras que el fiscal de turno de Litueche, Leonardo Troncoso, instruyó apoyar la búsqueda con personal de la Armada y del Gope de Carabineros. Ayer domingo, la rebusca comenzó a las 7 horas, y según trascendió, el Grupo de Rescate Anfibio de San Sebastián (Grass) se uniría al operativo esta tarde. Se cree que el cuerpo del joven fue arrastrado por la corriente de agua.
“Estoy desesperada porque pasan las horas y no sé nada de mi hijo. Su cuerpo no aparece por ninguna parte. El era papá de Valentina, una chiquitita de dos años que lo va a echar mucho de menos… igual que yo, porque mis tres hijos son lo más importante para mí. No me voy a ir de este lugar hasta tener noticias de mi hijo. (…) No pierdo las esperanzas de que encuentren su cuerpo”, indicó su triste madre.
