En una rápida y coordinada acción, personal de la Capitanía de Puerto de la Armada y de la Tercera Comisaría de Carabineros, detuvo a tres jóvenes y una jovencita en la playa principal de Pichilemu por ofensas a la moral, embriaguez y maltrato de palabra e intentos de agresión al personal.
Los hechos se produjeron alrededor de las 10.30 horas de hoy cuando los jóvenes en evidente estado de ebriedad estaban cometiendo diversas gracias típicas de curados chistosos y desinhibidos, no importándole la presencia de otras personas, adultos y niños, que van a disfrutar de la playa.
Sin embargo, un llamado telefónico puso en alerta a personal de la Capitanía de Puerto, quien fue hasta el lugar y al requerir se identificaran, hubo de inmediato renuencia a hacerlo, acompañado de improperios e intentos de agresión; lo que motivó al funcionario a repeler y solicitar apoyo.
Carabineros alertados acudieron al lugar y en conjunto los tomaron detenidos y llevados a la Comisaría de Pichilemu.
Lo peor de todo es que una vez más- los involucrados son pichileminos. Ya están lejanos los días en que este tipo de situaciones eran protagonizados por jóvenes visitantes y turistas.
No queremos ser trágicos ni agoreros, pero todo parece indicar que estamos ante la presencia de semilla de maldad, pues no es la primera vez que ocurren situaciones de este tipo y aunque menores como es el caso de esta ocasión- pero que se van haciendo común a otras acciones delictivas.
Cabe recordar que en días recientes, un grupo de jóvenes quemó un kiosco en la playa, en medio de una noche de juerga de alcohol.
La tarea para contrarrestar este tipo de acciones no solo corresponde a la Justicia y sus organismos, sino una acción permanente y persistente en cada hogar de la comuna, porque en el seno de cada familia está la formación de los hijos. Y, por cierto, también, en las enseñanzas y entrega de valores y buenas prácticas que se entrega en los establecimientos educacionales de la comuna.
NUEVO NUMERITO EN LA PLAYA DE JÓVENES PICHILEMINOS
