El alcalde de Paredones, Antonio Carvacho, valoró el desarrollo del proceso electoral en la comuna y realizó un llamado a la unidad política y al trabajo conjunto, independientemente del resultado presidencial, enfatizando que “lo importante es que gane Chile”.
El jefe comunal destacó que la jornada se llevó a cabo con total normalidad en los distintos locales de votación de Paredones, Bucalemu y San Pedro de Alcántara, resaltando el rol de los vocales de mesa, el Servicio Electoral, las Fuerzas Armadas, Carabineros y el personal municipal. “Ha sido un proceso tranquilo, ordenado, sin incidentes y con una participación responsable de la ciudadanía. Eso nos deja muy conformes como comuna”, señaló.
Respecto al escenario político nacional y a la tendencia que marcaban los resultados preliminares, Carvacho sostuvo que los alcaldes deben estar preparados para trabajar con cualquier gobierno. “Nosotros trabajamos con personas de todos los pensamientos. El desafío es superar las diferencias y enfocarnos en resolver los problemas reales de la gente”, afirmó.
En ese sentido, el alcalde apuntó a temas prioritarios como la seguridad, la salud y la vivienda, criticando la lentitud en soluciones concretas. “No puede ser que una persona espere años por una operación o que comités de vivienda lleven décadas esperando. Gobierno y oposición deben pensar de una vez por todas en quienes más lo necesitan”, enfatizó.
Carvacho también advirtió una desconexión entre la clase política y la realidad cotidiana de las comunas, señalando que muchas decisiones se toman lejos del territorio. “Los legisladores se han ido olvidando del ciudadano común, de la calle, del día a día. Eso no siempre se refleja en lo que se discute en Valparaíso”, sostuvo, recalcando la importancia de que las autoridades conozcan directamente la realidad local.
Finalmente, el alcalde reiteró su disposición a colaborar con la futura administración presidencial, llamando tanto al oficialismo como a la oposición a actuar con responsabilidad y grandeza. “Las diferencias ideológicas son legítimas, pero no pueden frenar el trabajo por el bienestar de las personas”, concluyó.






