La actividad fue realizada de manera muy poco objetiva, en el sentido de que siempre se enfatizó la figura del candidato Jorge Vargas por sobre la de cualquier otro participante. Cabe señalar que el denominado “foro” fue transmitido a través de la Radio Somos Pichilemu, que es dirigida por el mismo Vargas.
A esto se suma que, lejos de tratar una serie de temas de relevancia para la comuna, se “discutió” únicamente sobre la supuesta toma de terrenos en la costa local. De hecho, algunos candidatos —Hernán Garrido Salas y Mario Fabres— acusaron directamente al notario y conservador de bienes raíces, Juan Pablo Urzúa Ortiz de Rozas, de estar cometiendo delitos tendientes a la apropiación de terrenos públicos; el candidato Garrido instó a redactar un escrito para presentarlo en su contra ante la Corte de Apelaciones de Rancagua.
Ante esto, Vargas respondió que “si algo estoy tranquilo es que todo lo que hice, todo lo que actué es que está dentro de la norma, y ahí está reflejado en el actuar, por lo tanto ese tema que usted alude, discutámoslo, hablémoslo, conversémoslo y transparentémoslo para que nos dejemos de esas pachotadas que se tiran a la bandada y no cuentan con el suficiente respaldo”.
“Un documento puede decir mucho, pero lo que es saludable para el debate público, es decir, en qué situación se hizo el documento y por qué se hizo”, añadió Vargas, seguido de un extenso aplauso de sus simpatizantes.
Mario Moraga, de 77 años, quien fue regidor demócratacristiano de la comuna de Pichilemu entre 1967 y 1971, replicó que “yo no le voy a tirar nunca a la bandada, voy donde las papas queman siempre, y si he hablado de cosas que usted vendió, está la escritura aquí, yo no le he inventado escrituras […] Incluso ningún inconveniente [tengo], pero como yo no le creo a usted, no voy a conversar con usted“.
En un instante Vargas se levantó de su asiento exclamando “eso no es justo”, interrumpiéndolo el moderador señalándole que no le había cedido la palabra y que tomara asiento.
Cedida la palabra al exalcalde, éste volvió a ponerse de pie y, azuzado por sus simpatizantes —quienes lo aplaudían efusivamente— apuntó con su mano hacia Mario Moraga, diciendo de forma textual, con un tono agresivo y fuerte: “Ustedes han sido testigos de que no quiere debatir y no quiere reconocer, eso es lo que no debemos permitir, porque si yo estoy aquí es para dar la cara, porque estoy con el pueblo, porque ustedes me eligieron alcalde, ¡yo no se lo voy a permitir, porque están mis hijas, está mi señora, está mi pueblo, y por eso cuando dije voy a ser candidato le voy a dar la cara al pueblo, a la gente para defender a Pichilemu!, ¡no se lo voy a permitir lo que usted está diciendo!”.
La mofa al candidato Moraga, por parte de estos simpatizantes, fue permanente a partir de entonces. El candidato Fidel Chandía Parra, independiente apoyado por el Partido Progresista, dijo “no conozco al señor Moraga” —ante esto, el moderador le dijo ‘Se lo presento, aquí está don Mario Moraga’, estrechando sus manos ambos candidatos—. Acto seguido, Chandía destacó las características de Vargas, señalando que lo conoce desde hace un largo tiempo y que cree es una buena e intachable persona, refiriéndose hacia Moraga, entre otras cosas, como un hombre “mala clase”. Algunos candidatos reían ante este triste espectáculo.
Como los ánimos no se calmaban, el moderador suspendió el “foro” por unos minutos, tras lo cual optamos por retirarnos del lugar.
